#YoMeQuedoEnCasa

Hola a tod@s,

Lo primero, como ya sabéis de sobra, quedó suspendido todo contacto personal, toda actividad grupal presencial hasta nueva orden. Seguimos con los contactos virtuales diarios de prácticas, oraciones, o Reiki a distancia si se precisa. Y además, estamos estudiando la manera de hacer un encuentro grupal por Skipe, u otra forma de conexión que no sea costosa. En fin, ya os contaremos, pues estamos aprendiendo a sacar partido a este tiempo "libre".

Lo segundo, y más importante, es desearos que tod@s restéis bien, (dentro de lo bien que se puede estar en estas circunstancias), pues no se me escapa que, tarde o temprano, tendremos algún familiar o amigo, o familiares de amigos, infectados por este virus tan jodido (perdonadme la expresión) pero tan sabio (diseñado para hacer una selección natural )

Hoy, os mandé al grupo de Reiki una "profecía Hopi", al leerla fui plenamente consciente de la transformación emocional que va a suponer esta vivencia global. No nos va a quedar otra que cambiar los parámetros que rigen nuestras ´suciedades´ para transformarnos en sociedades más justas y limpias (tanto en sentido literal como figurado).

Hoy empezamos a ser conscientes del valor del tiempo, de estar con los nuestros, del trabajo que denostábamos, del autobús atestado; del valor de un árbol, un paseo, un abrazo, una cervecita con amigos, un cruce de miradas; el valor del compañerismo, la solidaridad, el respeto, la empatía...el amor.

Hoy, cada tarde a las 20:00h, somos conscientes del valor de nuestros semejantes con profesiones que en este momento se tornan valientes a la fuerza: todo el personal sanitario, todos los servicios de limpiezas, servicios y fuerzas de seguridad del Estado, dependientes de super, farmacéuticos, transportistas, repartidores y todos y cada una de esas personas que se juegan SU vida por que esta pandemia remita.

Hoy, en cada oración que hacemos al Universo, somos conscientes de la fuerza que tiene la unión. Y es así, unidos, como podremos salir adelante más fortalecidos.

Desde aquí os invito a que sigamos orando, en privado, en familia, compartiéndola con quienes sabéis que lo aprecian, haciéndola universal como es en sí misma: Universo puro.

Un abrazo virtual para tod@s