Qué no es Reiki. (o qué no debería ser)

Reiki No es una secta. Porque no hay un solo guru al que seguir y subvencionar y, aunque hasta hace pocos años las enseñanzas se mantenían semi secretas, ha habido un grupo de valientes que lo han hecho público y accesible a todo el mundo.

Reiki NO es una religión. porque, a pesar de tener rituales propios y normas, éstas no son de obligado cumplimiento, y no se adora a un dios concreto, si no que se admite la existencia de la energía universal (no particular), de modo que todas las religiones son partícipes de esta forma de vivir.

Reiki No es una terapia alternativa. Porque la sanación por imposición de manos es tan antigua como el hombre; por lo tanto, la medicina alternativa es la que llamamos tradicional o convencional. Es una técnica recuperada y socializada desde Japón a todo el mundo, aunque en cada parte del mismo se denomine de otra manera.

Reiki No es un negocio. Porque la "energía" es de todos, está en el aire. No podemos embotellarla y venderla, ni vender unos "poderes" que son innatos en cualquier ser humano (si quiere trabajarlos). Nuestro tiempo es como el de cualquier trabajador que se ha preparado para su tarea. Reiki sana, no es una receta, no es un vendaje, no es un milagro...

Reiki no es exclusividad de nadie. Porque la energía está en cada ser humano, en cada ser vivo; es la esencia que le da la vida, y el practicante de Reiki simplemente la canaliza, no la posee ni la domina.

Quizá necesitemos sentirnos especiales y por eso transformamos lo intangible en objeto susceptible de ser vendido, adorado... No. Reiki es sencillamente la Energía Universal que recorre nuestro cuerpo como regalo de vida. Equilibrarla es parte de nuestra tarea como seres evolucionados. A veces lo hacemos y la mayor parte de ellas no, porque somos caminantes que aún tenemos mucho que recorrer.

Concha Olid